Tema 9.
Reconquista y repoblación
1. El régimen feudal.1.1. ConceptoSistema contractual de relaciones políticas y militares entre los miembros de la nobleza de Europa occidental, que se institucionalizó durante la Edad Media. Tanto el señor como el vasallo eran hombres libres. En España el proceso tomó características especiales por la invasión musulmana. En Castilla había más libertad personal en la Alta Edad Media debido a la necesidad de guerreros que se necesitaban para la reconquista. Era tierra de frontera. 1.2. Relación de vasallajeSe establecían exclusivamente entre los nobles (incluido reyes). La relación se establecía mediante dos ceremonias: § La Investidura: el señor le entregaba a su vasallo un símbolo de la autoridad que le otorgaba: un báculo, un pendón, una espada, una mitra, etc. § El Homenaje: El vasallo besaba la mano de su señor en señal de sumisión y le juraba fidelidad. El señor lo levantaba y le daba un beso en la boca, el “osculum” y le otorgaba un Beneficio o feudo –normalmente un territorio- a cambio de unos servicios: 1. Auxilium: era un servicio militar que se realizaba de tres formas: § Cabalgada: Servicio rápido para represaliar a algún enemigo. Eran incursiones de saqueo a caballo en territorio enemigo (razias). § Hueste: El vasallo tenía que acudir a una campaña militar, que normalmente se iniciaban en primavera y terminaban en otoño, con su ejército. § Guardia: Normalmente el vasallo mandaba a alguno de sus hijos para formar parte de la guardia personal de su señor. 2. - Consilium: era un servicio político. El vasallo participaba en el consejo político de su señor y le debía prestar ayuda, si éste lo requería, en tareas burocráticas, judiciales y administrativas. El vasallo participaba en la Curia y después en las Cortes. 1.3. Relación de servidumbre (o dominicales) Se establecía entre los nobles y los siervos y campesinos. Eran contratos de arrendamiento de tierras muy variados. Normalmente el siervo tenía que entregar a su señor una parte de las cosechas y también trabajar un número determinado de días al año en la reserva del feudo. Hubo muchos campesinos que ante la ausencia de un poder central y el peligro de las invasiones y las guerras renunciaron a la posesión legal de sus tierras y a su libertad y se encomendaron a un señor para que los protegiera. Esta relación se establecía mediante
una ceremonia llamada Encomendación. 2. Evolución política de los reinos cristianos y avance reconquistador2.1. La Reconquista[1]2.1.1. Concepto[2]Es el proceso por el que los hispanogodos recuperaron el territorio perdido por el Reino de España frente al Califato de Damasco. Empezó en el año 718, con la rebelión del godo don Pelayo, y con la gran victoria en la batalla de Covadonga en 722 sobre el ejército mandado por Ambasa, general invasor del Imperio Islámico, y terminó oficialmente en 1492 con la toma del Reino Nazarí de Granada por los RR CC. En realidad, con la aniquilación del ejército del Imperio Almohade en la batalla de la Navas de Tolosa en 1212, fue cuando la suerte quedó definitivamente echada para los invasores afro-asiáticos. La perdida de España y la posterior Reconquista sintoniza con el contexto europeo, caracterizado en el siglo VIII y IX por las invasiones de bárbaros viquingos, húngaros, árabes, y eslavos, y en los siguientes con la posterior recuperación de esos territorios y la consolidación de los Estados europeos. Normalmente había dos campañas cada año. En mayo, como consta en los murales de la colegiata de San Isidoro de León, y en septiembre. Estas cabalgadas o aceifas, eran guerras de desgaste[3]. Se dedicaban al saqueo. El principal botín era humano. Los moros apresaban a los nobles para exigir rescate, a los plebeyos se les solía decapitar in situ, o bien se les hacía prisioneros y se les decapitaba en Córdoba, Sevilla o Pamplona, para divertimento de la población islamita y para abortar por el terror posibles rebeliones. 2.1.2. Características fundamentales§ La participación individual de los cristianos en la lucha, a diferencia de los musulmanes que se defendían con ejércitos mercenarios. § La misión de cruzada que consiguió el apoyo de Europa. § La conciencia de los reyes de sentirse herederos del Reino Hispanogodo y, por lo tanto, con el deber de recuperar la pérdida de España frente al Imperio árabe. El siglo XI fue el más cundió a los cristianos en la reconquista, coincidiendo con las cruzadas a Tierra Santa para recatar los santos lugares del poder de los infieles. Muchos cristianos ultrapirinaicos ayudaron militarmente a los hispanos. Durante este dilatado periodo los reyes de los distintos reinos peninsulares casaron a los príncipes entre sí para recuperar también la unidad política perdida por los godos frente al Imperio Islamita. 2.2. El Reino de Pamplona en el siglo XI y su unión con Aragón en el s. XIIIEl primer tercio del siglo estuvo dominado por Sancho III el Mayor (1004-35), conde de Aragón y rey de Pamplona, que incorporó los condados de Sobrarbe y Ribagorza a su reino. En 1029 su mujer heredó el condado de Castilla. Con el fin de protege al rey de León, Vermudo III, contra la nobleza levantisca tomó las ciudades de Astorga, Zamora y León. Sometió a vasallaje al conde de Gascuña. Todos estos éxitos le hicieron proclamarse Rey Ibérico. A su muerte el primogénito, García, heredó el reino de Pamplona, y a los demás hijos, sometidos a vasallaje del primero, le correspondieron a Fernando, Castilla; a Gonzalo, los condados de Sobrarbe y Ribagorza y a Ramiro, las tierras de Aragón. En el año 1076 Aragón y Navarra se unieron hasta el año 1134, en el que, al morir sin sucesor Alfonso I el Batallador, se separaron definitivamente. 2.3. Evolución política de los reinos de Castilla y León; su unión definitiva. Avance reconquistador. La Reconquista en el Reino de Asturias se relata también en el tema anterior de los núcleos de resistencia la invasión islámica. En 722 don Pelayo reconquistó la zona de Cangas de Onís. Se repobló con hispanogodos que habían huido o huían de los árabes. En 750 fue reconquistado el norte de Galicia, Asturias, Cantabria y Vascongadas. En todos estos territorios se repoblaron con hispanogodos que no querían someterse a los invasores, muchos de ellos volvieron de Francia donde se habían refugiado. En el 854 la frontera pasaba por Tuy (854) Orense, Astorga, Saladaña, Amaya y Cellorigo. En el 900 la frontera entre españoles y la oligarquía árabe estaba en el Duero: Oporto (868) Zamora (893), Toro (900), Simancas (899) Osma (912) En 1085 la frontera entre moros y cristianos estaba ya en el río Tajo. Fernando (1035-65), que heredó el condado de Castilla de Sancho el Mayor, entró en conflicto con Vermudo III de León, y al morir éste en Tamarón, heredó dicho condado y lo convirtió en Reino. Adelantó la frontera hacia el sur e impuso parias a los reyes de las taifas de Sevilla, Badajoz, Toledo y Zaragoza. Al morir dejó a su hijo Sancho, Castilla, a Alfonso, León y a García, Galicia. Se enfrentaron entre ellos, y Alfonso reunión en sus manos toda la herencia paterna. Rodrigo Díaz de Vivar, que era vasallo de Sancho, hizo jurar en la iglesia de Santa Gadea a Alfonso VI (1065-1109) que no había tomado parte en el asesinato, ejecutado por Bellido Dolfos, de su hermano, antes de entregarle el reino. Este suceso no se lo perdonó el rey y el Cid tuvo que marchar al exilio, desde donde logró reconquistar el reino de Valencia a los moros. Alfonso VI, que había estado exiliado en Toledo y tenía muy buenas relaciones con los mozárabes (hispanogodos cristianos) de la ciudad, logró que a la muerte del rey Al Mamún en 1085, éstos le proclamaran rey de Toledo, donde fue restablecida la sede episcopal Primada de España y Capital Imperial. Este hecho tuvo una importancia enorme, puesto que la ciudad era la antigua capital del Reino Hispanogodo y se convirtió en la capital del reino de Castilla entre 1087 y 1560. Fue ungido como Emperador de España. Los reinos de taifas viéndose amenazados pidieron ayuda al Imperio Almorávide, que mandó un ejército y derrotó a Alfonso en la batalla de Uclés(1108), donde murió con las botas puestas. Heredó el reino su hija doña Urraca, viuda del conde de Borgoña, quien viéndose amenazada por los musulmanes decidió casarse con Alfonso I el Batallador. Pasado el peligro sarraceno, a la nobleza y alta clerecía del reino de Castilla no le venía bien tener un rey tan poderoso y que apoyaba a la burguesía y al pueblo, y con la complicidad del poderoso obispo Gelmírez de Santiago enviaron al abad de Sahagún a Roma para pedir la anulación del matrimonio al Papa. 2.4. La separación de Castilla y León. El siglo XIIA la muerte de Urraca (1126), fue reconocido su hijo Alfonso VII rey de Castilla y León (1126-1157). Durante su reinado el hecho político más destacable es la independencia definitiva de Portugal. En cuanto a la economía se consolidan los intereses de los terratenientes castellanos sobre la burguesía de los Concejos. Gran parte de sus esfuerzos políticos se encaminaron a conseguir el título de Emperador. En su testamento dejo a su hijo Sancho III, Castilla, y a Fernando II, León. Sancho murió al año siguiente y originó en Castilla graves enfrentamientos entre la nobleza, liderada por los Lara y los Castro, que se disputaban la regencia de Alfonso VIII (1158-1114), menor de edad. En el año 1195 el Imperio Almohade derrotó a los cristianos en la batalla de Alarcos (Ciudad Real). La alianza de los navarros con los almohades provocó el ataque de Castilla que conquistó las vascongadas. 2.5. La unión de Castilla y León. Siglo XIIILa derrota de Alarcos alarmo al Papa que predicó una cruzada en Europa contra los musulmanes. Llegaron muchos cristianos ultrapirinaicos y se consiguió que los reyes de Castilla, Navarra y Aragón unieran sus fuerzas derrotando a los sarracenos en la decisiva batalla de Las Navas de Tolosa (1212), donde aniquilaron al ejército almohade, que ya no se pudo recuperar jamás. El botín de oro fue tan abundante que cambió en Europa el valor de la paridad oro/plata.
El reino de Niebla fue reconquistado por su hijo Alfonso X el Sabio (1252-84). Fue un rey muy culto. Creó la Escuela de Traductores Toledo, que difundió muchos libros de la Grecia clásica y helenística por occidente. Trató de obtener la corona del Sacro Imperio Romano Germánico, al que optaba por su matrimonio con Beatriz de Suabia. A su muerte y tras un enfrentamiento con sus sobrinos, los infantes de la Cerda, Sancho IV (1284-95) se proclamó rey y, con el apoyo de la Corona de Aragón, tomó Tarifa, vital para controlar el Estrecho de Gibraltar. En 1340 Alfonso XI aniquila totalmente a los Benimerines en la batalla del río Salado, cerrando definitivamente el camino a nuevas invasiones africanas y asegurando el estrecho de Gibraltar a la navegación cristiana. 2.6. El reino de Aragón y su expansión. La unión de Aragón y Cataluña La reconquista en lo que hoy llamamos Cataluña empezó de la mano de lo carolingios, que crearon la Marca Hispánica, que estaba dividida en condados, regidos por un conde nombrado por Carlomagno. Carlomagno intento llevar la frontera con lo moros al Ebro pero fracasó en Roncesvalles, y solo consiguió que el emir le reconociese como zona de influencia en 812 los valles de los Pirineos. Barcelona fue reconquistada por Carlomagno en el 801. En el año 815 ya estaban reconquistados totalmente los condados de Barcelona, Gerona, Ampurias, Rosellón y Urgel-Cerdaña. Se repoblaron con godos que habían huido al Reino Franco y que las capitulares carolingias llaman hispani. Ramiro I, hijo de Sancho el Mayor de Pamplona, heredó el condado de Aragón. Se anexionó los condados de su hermano Gonzalo, Sobrarbe y Ribagorza, y se tituló rey. Avanzó sobre el valle del Ebro reconquistando Javierre (1036), Falces y Benavarre (1062) y murió en el sitio de Graus. Sus sucesores penetraron en la zona de Huesca a través de los valles del Cinca y del Gállego, conquistando Graus (1083) y Monzón (1085). Al morir Sancho IV (1076), los navarros ofrecieron el reino a Sancho Ramírez y así se unieron los dos reinos. Pedro I de Navarra y de Aragón (1094-1104) reconquistó Huesca y Barbastro. Esta última ciudad sufrió mucho, puesto que fue varias veces reconquistada y conquistada. En ella intervinieron por primera vez cruzados europeos. Alfonso I el Batallador fue un rey prototipo medieval. Tenía mentalidad de caballero andante. Hizo grandes cabalgadas por el sur de la Península, plantando sus reales frente a las murallas de Córdoba, y retando a combatir a los caballeros musulmanes, que no aceptaron. Se trajo de Al Andalus a diez mil mozárabes[4] para repoblar las nuevas tierras conquistadas. Conquistó Zaragoza (1118), Tudela, Tarazona, Calatayud y Daroca, con la ayuda de los cruzados europeos. Gaston de Bearn participó con contingentes francos. Al morir testó a favor de las órdenes de caballería, pero los navarros eligieron a García Ramírez como rey y los aragoneses sacaron del monasterio a su hermano Ramiro II el Monje y lo mantuvieron como rey hasta que aseguró la descendencia con Petronila, a la que casaron, siendo menor de edad, con Ramón Berenguer IV, conde de Barcelona, dando lugar a la Corona de Aragón, que abarcó, sin confundirlos, el principado de Cataluña y el reino de Aragón. Reconquistó Lérida en 1148 y Fraga en 1149, y señoreaba con autoridad en ambas vertientes de los Pirineos. Pere II (1196-1213) luchó con bravura en la batalla de las Navas de Tolosa. Aprovechando su ausencia el Papa mandó a Simón de Monfort a reprimir a los albigenses[5] de Provenza y Occitania, vasallos de la corona de Aragón. Pedro acudió a marchas forzadas desde el sur a repeler la invasión y tuvo la mala suerte de morir en la batalla. Su hijo, el futuro Jaume I el Conqueridor, fue hecho prisionero por los papistas y liberado tras firmar el tratado de Corbeil por el que renunciaba a los derechos históricos de la corona de Aragón sobre el Midi francés, conservando Montpellier, Rosellón y la Cerdaña. Jaime I el Conquistador (1213-76) reconquistó las Baleares, Castellón y el Reino de Valencia en 1238. Tomó a los musulmanes Alcira, Xatiba y Biar, límite de la zona de expansión pactada en Cazola (Soria) en 1179 con Castilla. 3. La repoblación subsiguiente a la Reconquista3.1. ConceptoLa repoblación fue el reparto y la ocupación por los cristianos de las tierras reconquistadas a los reyezuelos o emires islámicos. La repoblación fue un fenómeno que empezó en el mismo momento de la reconquista de ciudades y territorios, pero que se prolongó lentamente en el tiempo mucho después de que los musulmanes perdieran el poder político en España. Un ejemplo elocuente es la repoblación que se inicio en el Reino de Valencia, después de que se expulsara a los moriscos en 1614. Otro ejemplo puntual sería la repoblación que llevó a cabo Carlos III en Sierra Morena con alemanes a finales del siglo XVIII. En vuestro cuaderno tenéis que identificar los topónimos que se repiten en la mitad sur de España, lo que es una prueba de quienes fueron sus repobladores. El Camino de Santiago se repobló con francos ultrapirinaicos. El franco Raimundo de Borgoña, casado con doña Urraca, repobló el Valle del Duero. El rey Sancho Ramírez concedió privilegios a todos los francos (europeos) que repoblaran Jaca, Se concedieron. Se creo la ciudad de Estella con repobladores francos. Pamplona tenía dos barrios francos y el de la navarrería. En las ciudades había más francos que hispani. Barcelona y Gerona con los hispani, nombre que consta en las capitulares carolingias, que huyeron de los moros. El normando Roberto de Bordet fue el encargado de repoblar la ciudad y el campo de Tarragona a comienzos del siglo XII. La Bética o Andalucía quedó renovada totalmente por población cristiana norteña. La repoblación se enmarca dentro de la explosión demográfica que tuvo lugar en Europa occidental durante los siglos XI, XII, XIII y primera mitad del XIV. La necesidad de defender los territorios reconquistados hizo que las ciudades o concejos, los repobladores cristianos y los labradores gozaran de unas libertades que no tuvieron los campesinos europeos, por lo que la opresión feudal fue muy leve en la España cristiana. 3.2. Formas de repoblaciónEn los primeros siglos fue frecuente la repoblación espontánea por “presura”, por la que un labrador describía con un surco de arado la tierra que iba a cultivar, dicha tierra se llamaba fundo. A partir del siglo XI la repoblación fue casi siempre oficial, es decir concedida por el rey: Monacal: Cuando el rey ponía bajo la jurisdicción y patrocinio de un monasterio la repoblación. Fue importante en los siglos VIII, IX y X. Concejil: el rey otorga a un concejo o ciudad privilegios, mediante una “carta puebla” para que sea repoblada. Fue muy importante entre el Duero y el Tajo. Señorial: cuando el rey
otorgaba a un señor feudal derechos para repoblar un territorio. Fue muy
importante en la mitad sur de la Península y en Extremadura. Muchos
latifundios de hoy día tienen su origen en esta forma de repoblación. De Órdenes Militares: el rey concede a la dichas Órdenes todos los derechos con el compromiso de conquistar tierras, repoblarlas y defenderlas. Fue muy importante en Valencia, Toledo y Andalucía. El norte de España[6] se repobló con hispanogodos que huían de la dominación árabe, que cada vez se hacía más opresiva, que se habían refugiado en el primer momento de la invasión en el Reino de los Francos y de francos y demás europeos a los que se les ofrecía grandes privilegios para que vinieran a repoblar España, como por ejemplo Cartas Puebla (leyes propias) y exención de impuestos por varias generaciones. Las ciudades del Camino de Santiago tenían más población ultrapirinaica que indígena. Un ejemplo de repoblación es el de la ciudad de Valencia: fueron asentadas 300 familias de Barcelona, otras tantas de Teruel, 200 de Tortosa, 200 de Zaragoza, 175 de Lérida, 150 de Montpellier, 130 de Daroca ... Por eso en Valencia siempre se ha hablado castellano y valenciano. El Reino de Valencia se repobló con catalanes, excepto algunos lugares concretos con aragoneses, que han mantenido la lengua castellana hasta hoy día. En Mallorca se expulsó a los musulmanes y se repobló enteramente con catalanes. El rey se reservó la mitad de la isla, y lo demás se repartió entre los reconquistadores en función del contingente miliar que habían aportado a la reconquista. El territorio andaluz fue dividido en donadíos para los militares y financieros y heredamientos para los repobladores que acudían a sustituir a los musulmanes expulsados o huidos. Los heredamientos de la ciudad de Sevilla varían entre las 8 aranzadas (4000 pies) de olivar y 2 yugadas de tierra que recibían los caballeros, y las 4 aranzadas y 1 yugada de los peones. 200 caballeros de linaje que recibieron, además de las 8 aranzadas de olivar, 5 de viña, 2 de huerta y 6 yugadas de tierra. A cada jefe de nave (marineros) se entregaron 1000 aranzadas de olivos e higueras y 5 aranzadas de cereal, además de una galera que tenían que mantener y sustituir a los siete años. La población andaluza fue totalmente sustituida por gente del norte de España y por europeos. 3.2.2. Expulsión de mudéjares, sefarditas y moriscos.Los judíos españoles fueron invitados a bautizarse por los RR CC en el año 1492. La razón fue que apoyaron contra los hispanogodos la invasión árabe, y que podían otra vez hacer lo mismo. Los que aceptaron el sacramento fueron llamados conversos, pero la mayoría prefirieron emigrar. Se asentaron en los dominios del Imperio turco (Este de Europa, Balcanes, norte de África), que llegó a ocupar gran parte de Europa por el Este hasta Viena, donde fueron detenidos por los Habsburgo. Estos judíos se llaman sefarditas y han conservado su idiosincrasia cultural y el castellano que hablaban en el siglo XV hasta nuestros días. Muchos moros fueron emigrando al sur a
medida que avanzaba la Reconquista. Los que se quedaron bajo gobierno
cristiano fueron llamados mudéjares. Otros se bautizaron para quedarse y
recibieron el nombre de moriscos. Los moriscos fueron expulsados de España en
el año 1614 por Felipe III, ante el temor de que apoyaran una invasión
turcomusulmana. Afectó sobre todo al Reino de Valencia, que perdió el 40% de
su población y que fue recuperada lentamente con repobladores catalanes. Los
moriscos se fueron a vivir al norte de África. Allí siguen sus descendientes,
que perdieron la lengua romance, pero que en Túnez todavía conservan parte de
su identidad cultural, las costumbres, las canciones, los ritos sociales y las
técnicas de trabajo. |
[1] J. A. García de Cortázar. La Época Medieval. Historia de España. Alfaguara II.
[2] En la Cronología de la Edad Media de España se da la fecha exacta de cada población reconquistada y las batallas más decisivas.
[3] Las Batallas legendarias y el oficio de la guerra. Margarita Torres. Edit. Plaza & Janes. 2002
[4] Los mozárabes eran los hispanogodos que se habían quedado a vivir en territorio gobernado por los árabes y que se habían mantenido fieles a su religión y cultura goda. Se gobernaban por el Liber Judiciorom o Fuero Juzgo y tenían sus propio jueces y líderes. Eran mucho más cultos que árabes y beréberes.. Por lo que en un principio ocuparon cargos administrativos en la Corte del emir. Finalmente, por las persecuciones, desaparecieron porque fueron ejecutados, deportados a África o emigraron a los Reinos cristianos del norte.
[5] Albigenses: “Iglesia de los Buenos Cristianos”. Fueron los primeros cristianos que tradujeron la Biblia a
una lengua vulgar, la lengua languedociana (parecida al valenciano). Eran
predicadores de la Buena Nueva del Evangelio. Solo reconocen el Nuevo
Testamento y rechazan el Antiguo. Llevaban una vida pura y virtuosa basada en
el estudio de las Sagradas Escrituras. Rechazaban la jerarquización de la
Iglesia católica y los sacramentos. “La
verdadera historia de los cátaros”. Anne Brenon. Edic. Mtnez. Roca. 1997. Barcelona.
[6] Historia 16. Historia de España, volumen 8, pág. 50. José Luis Martín, Catedrático de Historia Medieval de la UNED